Como habrás podido notar, en todos los supermercados puedes encontrar una amplia variedad de productos ricos en proteínas: cereales, yogures, barritas, pan…
En los últimos años, las proteínas se han vuelto muy populares, pero ¿son realmente más importantes que otros componentes en nuestra alimentación?
¿Qué son las proteínas?
Las proteínas son un tipo de macronutriente, al igual que los carbohidratos y las grasas. Cada uno cumple una función diferente:
- Las proteínas contribuyen a la regeneración de estructuras dañadas y participan en la actividad enzimática (entre otras).
- Los carbohidratos, aunque no son esenciales, son la principal fuente de energía para nuestro organismo y la forma más eficiente de reponer los depósitos de glucógeno, necesarios para realizar cualquier tipo de actividad física.
- Las grasas contienen ácidos grasos esenciales que desempeñan funciones importantes en el cuerpo y que no podemos obtener de ninguna otra manera que no sea a través de los alimentos. Además, forman parte de estructuras como las membranas celulares, participan en funciones hormonales y también son una fuente de energía.
El equilibrio significa más que proteínas
Es cierto que las funciones de estos macronutrientes no están completamente delimitadas. Por ejemplo, si no consumes suficientes carbohidratos o grasas, es posible que tu cuerpo utilice las proteínas (y, por lo tanto, tus músculos) como fuente de energía. Sin embargo, este proceso fisiológico no es eficiente y nuestro cuerpo funciona mejor cuando destinamos cada nutriente a su función principal.
Todo esto se refiere a los macronutrientes, pero no podemos olvidarnos de los micronutrientes. Los micronutrientes incluyen vitaminas, minerales, polifenoles, entre otros. Estos nutrientes son indispensables para el correcto funcionamiento del organismo, aunque se requieren en cantidades más pequeñas.
El arroz integral, una fuente de micronutrientes
Cuando eliminamos un grupo de macronutrientes, es común que aparezcan deficiencias de micronutrientes. Por ejemplo, los carbohidratos integrales (por ejemplo el arroz integral) son una importante fuente de selenio, magnesio y ácido fólico. Aunque también se pueden encontrar estos micronutrientes en legumbres y diferentes tipos de verduras, si eliminamos por completo los carbohidratos, es probable que no alcancemos las recomendaciones diarias de estos nutrientes.
Popularización de las proteínas
En general, el consumo de proteínas se ha vuelto popular debido a su función anabólica, es decir, su capacidad para aumentar la masa muscular, y a la idea de que son más saciantes y ayudan en la pérdida de peso. Sin embargo, la función anabólica de las proteínas siempre dependerá del ejercicio físico que realice cada persona. Sin estímulo, por más proteínas que se consuman, los músculos no crecerán.
Además, la sensación de saciedad también depende de muchos factores, como asegurarse de consumir suficientes calorías, seguir una alimentación variada que incluya todos los macro y micronutrientes necesarios para un correcto funcionamiento corporal, y disfrutar de comidas en ambientes agradables.
Tener una alimentación balanceada tiene mayores beneficios que todas las bondades que pueda ofrecer un solo nutriente. Por ejemplo, más allá de las funciones explicadas anteriormente, incluir hidratos de carbono en las cenas se relaciona con una mejora del descanso nocturno.
El origen importa (y mucho)
Además, es importante tener en cuenta no solo la proporción de macro y micronutrientes, sino también su procedencia. Por ejemplo, las dietas con un mayor consumo de proteínas de origen vegetal se han relacionado con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares, a diferencia de las dietas basadas únicamente en proteínas de origen animal.
Por todas estas razones, el consumo de proteínas puede considerarse importante, pero no más importante que el resto de los macronutrientes y micronutrientes. La actual promoción de alimentos ricos en proteínas responde a una tendencia que actualmente se ha popularizado en la alimentación y por ello no podemos dejar de cosiderarla una moda más.
¿Tienes dudas?
Si después de leer este post te han surgido dudas sobre las proporciones adecuadas de proteínas en la alimentación o cuál es el mejor balance riesgo- beneficio entre proteínas animales y vegetales (así como sobre su calidad), puedes pasarte por mi página personal y contactarme. ¡Estoy aquí para lo que necesites!
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